En la actualidad, las lesiones oculares son tratadas por la aplicación de colirio tópico. Debido a las barreras de la superficie ocular, las gotas oculares deben aplicarse varias veces en un día, causando efectos secundarios tales como glaucoma, cataratas así como la pobre recuperación del paciente.
Investigadores estadounidenses desarrollaron un sistema de administración de fármacos mediante una nanooblea en el que unen el trabajo de un polímero y de las drogas para mejorar la eficacia de la terapia con respuestas inmunes adversas insignificantes.
La nanooblea es un pequeño disco circular transparente que contiene matrices de nano reservorios cargado con fármaco. Este dispositivo permite la liberación lenta del medicamento permitiendo el aumento el tiempo de residencia del fármaco sobre la superficie ocular y su posterior absorción en el tejido circundante. Al final del periodo estipulado de liberación del fármaco se disuelve y se desvanece.
En las pruebas in vivo se demostró la eficacia en el tratamiento de la córnea, la cual se observó mediante un sistema de barrido láser y se estudió la reacción al polímero, revelándose que, aplicado una vez al día la nanooblea, es dos veces más eficaz terapéuticamente, en comparación con las dos aplicaciones al día de la gota ocular tópica. Así se constató que la nanooblea no es tóxica y no afecta a la curación de las heridas ni la recuperación del epitelio de las córneas por quemadura ocular inducida.
Los resultados confirmaron que la liberación del fármaco desde este dispositivo es más eficaz en comparación con el tratamiento tópico de las gotas oftálmicas incluso a una frecuencia de dosificación inferior.
La simplicidad y eficiencia de este sistema de administración de fármacos proporciona una nueva y novedosa modalidad para la administración no invasiva de fármaco a la superficie ocular. Con este sistema se puede ofrecer una amplia gama de medicamentos, independientemente del peso molecular o propiedades químicas.
Este sistema puede ser instilado fácilmente en la superficie ocular por la punta del dedo del paciente sin ningún procedimiento clínico, razón por lo cual es muy conveniente, también deseable para el tratamiento de lesiones oculares, infecciones, ojo seco crónico, glaucoma, y otras condiciones oculares inflamatorias.
A pesar de que este procedimiento se probó en ratones, estos polímeros y fármacos utilizados en su desarrollo ya están en uso clínico, por lo cual pueden llevarse rápidamente para ensayos en humanos.